Nunchía

Hacia 1655 se sitúa el año de fundación de San Carlos de Nunchía. El 1 de marzo de 1770 se erigió en parroquia. Fue cuna de Salvador Camacho Roldan, ilustre colombiano que nació en el punto denominado Tamuría y ocupo, como designado la presidencia de los Estados Unidos de Colombia del 20 de diciembre de 1868 al 2 de enero de 1869, en reemplazo del titular Santos Gutiérrez. Nunchía fue capital de la Prefectura de Casanare hasta 1958.
El valle de Nunchía, Departamento de Casanare, estuvo poblado por amerindios de lenguas Achagua, Sáliva y Tunebo que, a lo largo de la colonia permanecieron bajo la tutela y dominio material de los encomenderos y evangelizados por la compañía de Jesús que, desde la localidad de Morcote, direcciona su misión cristianizadora
La ciudad de Nunchía tomó el nombre del rio que baña el lote de tierra donde se levantaron los tres primeros edificios, la iglesia, la alcaldía y la cárcel. El significado de su nombre en el idioma Chibcha, corresponde a CHIA; que traduce: mes, ortiga, luz, nosotros, nosotras, luna. Las caravanas de indios Sálivas al contemplar el valle, en sus paseos nómadas le llamaron NONCHIRIA O NONCHIA, que significa Rio Verde. Por adaptación fonética el nombre terminó siendo Nunchía.
Hacia el año de 1179. Casanare contaba con 21931 hombres libres y 118 esclavos. En el año 1778, el Estado con fines fiscales establece una factoría para la compra del tabaco el Pore. La factoría y a Nunchía como únicos campos permitidos para los cosecheros matriculados. Nunchía contó con la fabrica de aguardiente llamada el Zaque y la moneda se denomino la Macuquina
Después del año 1785 fue construida la iglesia.
En el mes de abril de 1816, Nunchía fue incendiada por orden del General Barreiro, con el fin de bloquear el avance del ejercito patriota quedando de ella solo escombros y cenizas. El día 26 del mismo mes, siendo las dos de la tarde, llega la división de vanguardia del ejercito libertador. La infantería pernocta allí y el día 29 llega el General Santander y se acantonaron los lanceros el Regimento Guías de Casanare. Triunfante la revolución de Independencia Nacional, el gobierno republicano se olvida de Nunchía, para recordar estas fechas memorables el gobierno municipal le ha dedicado dos monumentos como es la piedra de Bolívar y el Monumento de la Campaña Libertadora.
En el año de 1880, los dos cultivos más importantes en Nunchía, fueron el tabaco, zarrapia (perfume) y el café. Hoy seguimos cultivando café y exportando junto con la Federación de Cafeteros de Támara como variedad Colombia en el mundo.
En 1881 el Dr. Moisés Higuera, fundó en Nunchía un Colegio de Misiones o Seminario Menor con nombre de Santo Tomas de Aquino.
Para el año 1900, encontraron refugio en este municipio muchísimas personas importantes del interior del país, quienes traían consigo gran cantidad de libros con los cuales don José María Rivera Tobián, fundo la biblioteca “Salvador Camacho Roldán”, biblioteca desaparecida con el incendio ocasionado en el asalto de Nunchía por la Guerrilla Liberal del 48.
Entre los personajes importantes que llegaron podríamos destacar al sastre Daniel Valdiri, fundador de la cadena Suramericana de Almacenes Valdiri, y al General Rafael Uribe Uribe, quien residió en la casa de Rivera Tobián hoy casa de Don Jacobo Rivera. Había por ese entonces una sociedad distinguida y una refinada vida social.
Nunchía se caracterizó por ser un pueblo liberal defensor de las ideas del radicalismo liberal, existió un párroco llamado Ezequiel Moreno Díaz, quien arengaba desde el púlpito contra los liberales del pueblo. Un día domingo después de la celebración religiosa, los señores Tadeo Moreno y Ramón Moreno, cansados de esta situación, toman de los brazos y piernas al sacerdote y lo encarcelan.
En diciembre de 1991, un siglo y un año después de haberse inaugurado la energía eléctrica en Bogotá, llega la interconexión eléctrica a este Municipio.
La expulsión de los Jesuitas del territorio se convierte en la razón fundamental para que se de vía libre a la fundación de Nunchía. Al perder el dinamismo y al desarticularse el emporio de las haciendas Jesuitas, en particular la de Tocaría, la zona siente el vacio, el cual tiene que llenarse de algún modo; para ello recurre a su vecino mas próximo como es la gente que habitaba entre los ríos Tocaría y Pauto.
La ubicación del municipio de Nunchía sobre el Piedemonte Casanareño Llanero, permite identificar la presencia de secuencias sedimentarias terciarias de considerable espesor, afectados por tectonismo intenso, reflejado en la formación de amplios pliegues disectados por un cinturón de fallas inversas, de buzamiento hacia el oeste y paralelas al este de la cordillera.
El paisaje predominante en el área de interés corresponde a colinas denudadas y depósitos aterrazados cubiertos parcialmente por suelos residuales y coluviales, siendo frecuente la presencia de fenómenos de erosión, principalmente en las áreas desprotegidas de vegetación, con pendientes transversales pronunciadas o afectadas por procesos tectónicos.